Azafrán

Azafrán, de José Manuel García Marín

Azafran

Este autor debería tener una seria conversación con sus editores, porque este es uno de los más claros ejemplos de libro mal vendido.

Yo cuando voy a elegir un libro, busco títulos, me recreo en las portada, veo el perfil del autor, abro algunas páginas a ver si me termina de enganchar… y si todo cuadra, me lo llevo. Digamos que es como ir a la tienda de alimentación de la esquina: si voy a comprar un queso fresco, elijo el que creo mejor y cuando llego a casa espero catarlo y probar algo cremoso y suave, y no encontrarme con un trozo de Parmesano Reggiano, por mucho que ese queso también me vuelva loco.

Así que, dejando temas culinarios a un lado, mi conclusión es que el cliente de la librería saldrá creyendo que se lleva una novela histórica y cuando llegue a casa se encontrará con otra cosa. Un ensayo literario sobre las tres religiones que, como los tres pétalos del Azafrán (de ahí el título), convivían sobre unas mismas raíces en Al-Ándalus.

La novela nos sitúa en 1252, un período histórico marcado por el triunfo de la reconquista cristiana por casi toda la Península Ibérica, y el acoso hacia los musulmanes, cuyo último reducto seguro quedaba restringido a los límites del Reino de Granada. El autor presenta el viaje de un maestro musulmán, Mokhtar ben Saleh, desde Sanlúcar de Alpechín (cerca de Sevilla) hasta el reino nazarí de Granada, de Oeste a Este de la actual Andalucía. Por el camino conocerá a gentes y lugares que le introducirán en los misterios la religión hebrea, le abrirán algunas de las puertas de la fe cristiana, para terminar conociéndose a sí mismo y reencontrándose con su propia religión, la musulmana. Es decir, que el libro es casi un repaso de las tres religiones místicas que por aquel entonces convivían en Al-Ándalus.

A ver, no me malinterpretéis. No se trata de un mal libro pero, como decía al comenzar, es un libro mal vendido, y ahí van mis razones:

  • En la cubierta leemos: “…un fascinante recorrido por Al-Ándalus en su momento de mayor esplendor“, cuando en realidad la historia se sitúa en plena decadencia de Al-Ándalus, tras su descomposición en reinos de taifas y casi al final de la  reconquista cristiana.
  • También se presenta en portada como una novela histórica, y creo que, aunque situada dentro de un período de la antigüedad, no es para nada una novela histórica al uso. Es más bien un libro para describir un viaje iniciático, al más puro estilo de Paulo Coelho.

Y ahora, elegid con libertad, porque ya sabéis lo que hay tras la portada. Yo, por mi parte me quedo con una bonita frase: “yo soy la hierba, y vosotros… la frescura del rocío“.

Francisco Sánchez Cid (twitter @LightMyWay78)

 

2 comentarios en «Azafrán»

Deja un comentario