Memorias de Adriano

Memorias de Adriano, de Marguerite Yourcenar

MemoriasAdriano

Opinión: Una joya literaria, donde cada página es una reflexión filosófica acerca del poder, del amor, de la vida y de la muerte. El hombre ante sí mismo.

Hoy soy una mujer feliz, y es que, en nuestro Club de Lectura, nos hemos enfrentado a un gran reto: La lectura de un libro muy especial, Memorias de Adriano. Duro de leer si se pretende hacerlo de corrido, no lo voy a negar, pero un libro que saboreándolo muy poco a poco, te hace pensar y reflexionar sobre casi todo, y eso, en general y como diría  Brassens, es cansado.

También soy una mujer preocupada, porque enfrentarme a una reseña de Las Memorias de Adriano es otro reto, y en este caso, es posible que me supere.

Generalmente, en las reseñas, para animar a leer el libro del que estamos hablando, decimos frases como: Es de fácil lectura, la trama tiene un buen ritmo, sabe mantener la tensión… Pero  ¿Cómo les puedo estimular a la lectura de un libro en el que el ritmo no se consigue con movimiento sino con ideas filosóficas?

El caso es que nos encontramos ante un ejemplo perfecto de “falsa” novela histórica, unas memorias de un Emperador romano del Siglo II, contadas por una mujer nacida en los albores del siglo XX, y que leídas hoy, en el siglo XXI, me han resultado absolutamente actuales. Y si como dicen algunos, Yourcenar utiliza a Adriano para hacer sus propias reflexiones filosóficas, entenderán ahora porqué me ha interesado tanto esta obra como su singular autora.

 

hadrian4Para hacer un recorrido a través del Imperio Romano, utiliza la vida de Adriano, uno de los emperadores del siglo II de nuestra era del que menos se había escrito hasta la fecha; elige narrarlo en primera persona y en forma de eterna epístola al que parecía que sería su sucesor, Marco Aurelio.

La propia Marguerite Yourcenar dijo en su día: “Si decidí escribir estas Memorias de Adriano en primera persona, fue para evitar en lo posible cualquier intermediario, inclusive yo misma. Adriano podía hablar de su vida con más firmeza y más sutileza que yo”.

Pero me permitirán que yo lo dude, y aunque en mi caso servirá ese famoso dicho de “que atrevida es la ignorancia” (y lo digo naturalmente por la mía propia), creo que, dada la gran inteligencia de esta mujer, habla en primera persona para que sus propias reflexiones filosóficas resulten más creíbles, y pasen, junto con el resto del libro, como así ha sido, a los anales de la historia.

Y está claro que se cumplieron sus propósitos (si es que fueron los de mi teoría) ya que a través de Adriano pudo exteriorizar sus pensamientos más profundos e íntimos con una gran pericia e inteligencia.

Seguramente no me habría animado a hacer esta reseña de no ser porque en esta ocasión, el libro me ha llevado a interesarme por la fascinante vida y obra de su autora: Margarite Yourcenar. Y ha sido esa fascinación lo que, a pesar de que normalmente ni se hace, ni lo hago, hoy sí daré algunas pinceladas sobre su biografía.

Marguerite_YourcenarMarguerite Cleenewerck de Crayencour nació en Bruselas en 1903, y fue educada por su padre que provenía de una familia aristocrática francesa, por lo que Marguerite se crió en Francia en casa de su abuela paterna (ya que su madre murió días después del parto). Leía a Racine y a Aristófanes a la edad de ocho años, y su padre le enseñó latín a los 10 y griego clásico a los 12, como se puede ver la niña ya era todo un prodigio.

Su padre, gran amante de los viajes, la llevó siempre con él, y supo transmitirle, (a parte del dinero y la herencia), su amor por los viajes y la historia, de hecho viajó casi por todo el mundo, impregnándose de todo tipo de culturas y religiones. En 1919, abandona su nombre de pila y empieza a firmar como Marguerite Yourcenar.

Su mejor amiga en ese momento, una traductora llamada Grace Frick, la invita a Estados Unidos, donde ambas serán pareja desde 1937 hasta la muerte de Frick en 1979. Al año siguiente, en 1980, fue elegida como primera mujer miembro de la Academia francesa, dato que me ha sorprendido, pues ya, desde 1970 pertenecía a la Academia belga.

Memorias de Adriano es su gran obra, escrita de forma exquisita, con una calidad literaria que roza la perfección en algunos pasajes, como un largo poema (también la autora tiene un amplio repertorio poético), pero llego a comprender que su lectura para algunos pueda llegar a ser un suplicio, y ante su espesura y la ausencia de diálogos y de acción,  sus pocas páginas se  puedan hacer eternas.

Para otros muchos, en cambio, es su libro de cabecera, que leen y releen de forma casi rutinaria; y para mí es una joya literaria, donde cada página es una reflexión filosófica acerca del poder, del amor, de la vida y de la muerte.

El hombre ante sí mismo.


Susana Hernández

 

14 comentarios en «Memorias de Adriano»

  1. Hola Susana,
    Has dado en la diana. Es muy díficil hablar de este libro en el sentido convencional de lo que debe ser una reseña al uso.
    Lo lei en el año 82 y, desde entonces, lo he vuelto a releer cuatro veces. Yo también me he hecho adicta de Marquerite Yourcenar, he leido todos sus libros, pero Memorias de Adriano es mi preferido con mucha diferéncia.

    Me alegra que nuevamente coincidamos en nuestros gustos literarios y. sobre todo, que des a conocer esta joya de la literatura comtemporánea

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  2. Gracias Coco!!
    Sí, era una reseña muy difícil, hay muchos enamorados de esta obra, y muchas reseñas ya hechas y consultadas.
    Creo que, como dices, merecía la pena recordarla y darla a conocer a los más jóvenes …, por si se atreven con ella.
    Cierto que una vez más coincidimos en gustos, eso me indica que voy por el buen camino, pues ya veo que tienes mucho recorrido en tus lecturas.

    Un abrazo !!!

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  3. Yo tambíén la leí hace mucho tiempo. En efecto, es una excelente novela, fruto de las investigaciones históricas de Yourcenar que, naturalmente, toman forma de ficción. Pero no es una falsa novela histórica, es histórica realmente, y bastante más fiel que todas las que más tarde han proliferado como churros y sin ningún rigor en lo que cuentan. También es una “falsa autobiografía”. Es el recurso que utiliza la autora para utilizar la primera persona. Hay otro recurso similar: el falso manuscrito encontrado, que utilizaron Cervantes y otros. Bueno, sólo quería aclarar esto: no falsa novela histórica, sí falsa autobiografía como recurso literario.

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  4. La verdad es que me estoy empezando a enganchar a vuestras críticas.
    Te cuento: no soy nada aficionado a la novela histórica. Nada. Me gusta el ensayo histórico y los documentales, pero “odio” la ficción histórica. Sin embargo, te aseguro que en cuanto tenga un hueco, leo el libro. Ya te contaré.

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  5. Gracias Norkin !!!!, y yo que me alegro de tu enganche Jajajaja

    Si eres más aficionado al ensayo que a la novela, creo que te gustará. La mayor parte de la gente que me recomendó este libro para el Club de lectura, eran licenciados en Historia.

    Espero que regreses y nos cuentes tus impresiones.

    Un saludo

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  6. Hola
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    Marco.

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  7. pues a mi me superó el libro, tengo que reconocerlo. Lo dejé después de leer unas 20 páginas. No lograba engancharme, y tenía muchas ocupaciones. Necesitaba una lectura que me ayudara a distraerme y no que me hiciera pensar. Quizá lo retome y le de una oportunidad en unas vacaciones…
    me ha gustado mucho tu reseña ¡gracias!

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  8. Tienes razón Ale, no es un libro fácil de leer. Es posible que conocer bien la vida de la autora hace más interesante su lectura, y desde luego no es un libro para leerlo seguido, es mejor hacerlo poco a poco, incluso mientras lees otras cosas un poco más ligeras. Pero una vez concluído verás que ha mercido la pena.

    Gracias a ti por tu comentario

    Un abrazo!!!

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  9. Está entre mis libros de cabecera. Cada vez que lo leo disfruto más y más. Todas las veces son diferentes y en todas encuentro algo nuevo, en la historia, en el personaje, en el amado, en los escenarios, en la filosofía del libro y en la del mismo emperador. Unas veces te quedas más con la parte filosófica, en otras ocasiones con la historia de amor, en otras con las vivencias de un hombre de estado, en otras es la enfermedad, la soledad.

    Un libro exquisito para descubrir y redescubrir constantemente.

    Un saludo

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  10. Hola a todos, deciros que me an hablado de esta obra y voy a comprar el libro y empezar a leerlo, gracias por describir tan bien su lectura. saludos Mercedes.

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