Reseña del libro “El aire de Atenas”, de Antonio P. Poza
Me encantan las novelas que conectan con mi lado más humano, más vulnerable. Tengo predilección por las historias aparentemente sencillas que esconden en ellas casi un tratado sobre la condición humana. Aquellas que me hacen reflexionar y replantearme mi existencia, que no es poca cosa, son mis favoritas. Antonio P. Poza, el autor del libro que hoy reseño, ha conseguido todo esto con su novela El aire de Atenas.
No es fácil conectar así con el lector, y mucho menos partiendo desde lugares comunes, pero cuando se hace bien, cuando el escritor sabe hacer ese clic necesario en la cabeza de los lectores, es una auténtica gozada. Esto es lo que sucede con esta novela.
Benjamin es un neurólogo que, cansado de su rutina en Londres, decide alquilar su apartamento y dedicarse a trabajar haciendo sustituciones en destinos remotos bajo soberanía británica. Su primer trabajo será en una isla atlántica de clima cálido llamada Santa Brígida. A los pocos días de estar allí, conoce a Sunita, una mujer india que desde hace poco más de tres años dejó atrás Leicester para trabajar en el gobierno local de la isla. Una mujer de una belleza capaz de deslumbrar a cualquiera y por la cual, desde el primer momento, Benjamin siente una fuerte atracción.
Ambos comparten un pasado común: los dos han dejado atrás la comodidad de sus vidas para vivir una aventura fuera de la rutina:
“No era verdad que estaban allí, en aquella roca varada en medio del océano, sin escapar de nada, ni de nadie. Nadie se va a ese lugar tan remoto, distante y mal comunicado, por placer, tiene que haber un algo que los lleve hasta allí. La aventura es una búsqueda, pero también una huida, al fin y al cabo”.
Benjamin pronto entabla relación con un grupo de amistades de lo más peculiar que lo acogerán en esta nueva experiencia: Peter, Simon y Amelia se convierten en su nueva familia allí. Pero sobre todo Sunita.
Y es que aquella intensa atracción inicial que ambos sintieron poco a poco comienza a consolidarse y empieza a fraguarse una relación en la que la pasión y el deseo serán las principales protagonistas de esta historia de amor nada corriente.
Entretanto, Benjamin mantiene una correspondencia mediante mails con su gran amigo Thomas, a quien le une un pasado de amistad que esconde, a su vez, muchos secretos.
Supongo que podría contaros más sobre la trama, pero sería una estupidez por mi parte. El aire de Atenas es una novela que se fragua a ritmo lento, pero que al mismo tiempo esconde un huracán entre sus páginas que en cualquier momento amenaza con arrasarlo todo.
Esta es una historia que habla de pasados, de amores con fecha de caducidad y de amores inquebrantables. Una novela en la que el amor aparece retratado desde diferentes prismas: desde la pasión irrefrenable hasta el amor más tierno, desde la incondicionalidad hasta el desgaste.
Antonio P. Poza muestra un dominio absoluto en el arte de narrar y mantener un ritmo delicioso que permite al lector engancharse a esta historia desde el primer momento. Como os decía, El aire de Atenas es una novela que se va fraguando poco a poco, pero que, cuando menos lo esperamos, muestra sus cartas y nos da donde más duele.
Personalmente, he disfrutado mucho esta historia de amores cruzados, de pasiones narradas con un erotismo brillante, de cambios, evoluciones y comienzos y finales. Estoy segura de que muchos de vosotros conseguiréis conectar con ella del mismo modo en que lo he hecho yo y es que, sin duda, esta es una novela que habla de tú a tú, de corazón a corazón, de escritor a lector.