Caer, de Éric Chevillard

CaerHoy tengo entre mis manos una reseña difícil. Os preguntaréis por qué (y si no ya os lo digo yo): Caer es una de las novelas más raras que he leído últimamente. De hecho, si tuviera que hacer una lista de lecturas raras de narices creo que Caer entraría directamente en el top five. Y eso que he leído mucho.

Voy a intentar aclarar qué quiero decir cuando califico este libro como raro. Cuando decimos que algo/alguien es raro, suele tener un cierto toque despectivo. Lo raro es atípico. Lo atípico es diferente. Lo diferente no entra dentro de las normas establecidas y plaf, queda fuera de la normalidad, que es lo bonito y cómodo.… Leer la reseña completa del libro "Caer, de Éric Chevillard" “Caer, de Éric Chevillard”

La repetición, de Ivica Djikic

La repeticiónCualquier país que ha sufrido una guerra civil sabe que habrán de pasar décadas, quizá siglos, antes de que lleguen a restañarse todas las heridas. A diferencia de lo que ocurre con una guerra entre países, en una guerra civil no hay resquicio, por pequeño que sea, donde no logre introducirse el veneno del odio entre hermanos, amigos y vecinos.

Pasado el tiempo y restablecida la paz, la sociedad se da cuenta de que es tan difícil extraer ese veneno que resulta más fácil dejarlo ahí y seguir con nuestra vida, como un anciano que se empeña en sobreponerse a sus achaques e ir a comprar el pan.… Leer la reseña completa del libro "La repetición, de Ivica Djikic" “La repetición, de Ivica Djikic”

La montaña mágica, de Jiro Taniguchi

La montaña mágicaCurioseando por google tras leer esta novela, escribo “Jiro Taniguchi” y le doy a “imágenes”. Entre muchos dibujos hermosísimos, de exquisito detalle y primorosa perspectiva, me encuentro con unas pocas fotos de un señor con bigote y gafitas redondas. Su rostro bonachón y su mirada escéptica, con un toque socarrón, son difíciles de reconciliar con la inmensa melancolía que con frecuencia destilan sus obras. En ellas, desde la inolvidable Barrio lejano hasta El olmo del Cáucaso, pasando por El paseante o El almanaque de mi padre, el maestro Taniguchi nos cuenta historias sobre personajes que, sin llegar a sentirse perdidos, sí sienten que algo o alguien, puede que ellos mismos, quizá muy lejos de aquí o quizá en la tienda de al lado, tal vez ahora mismo o tal vez en otro tiempo remoto, necesita su ayuda, o tan sólo su presencia.… Leer la reseña completa del libro "La montaña mágica, de Jiro Taniguchi" “La montaña mágica, de Jiro Taniguchi”

De noche, bajo el puente de piedra, de Leo Perutz

De noche, bajo el puente de piedraCuando una amiga supo que me iba a leer este libro, me dijo que para ella había sido una de las lecturas más deliciosas de su vida. Usamos esa palabra normalmente para referirnos a comida, pero si miramos en el diccionario pone lo siguiente: delicioso/sa: muy agradable o ameno, placentero. Hay muchas cosas en la vida que nos resultan agradables, que nos causan placer, que resultan muy amenas y un libro, efectivamente, puede proporcionar todo eso. En ese momento me resultó algo chocante que usase el calificativo “delicioso” para referirse a un libro, pero estoy de acuerdo con ella en que algunas lecturas son auténticas delicias, pequeños bocados de placer, como un bombón, por ejemplo.… Leer la reseña completa del libro "De noche, bajo el puente de piedra, de Leo Perutz" “De noche, bajo el puente de piedra, de Leo Perutz”

Zona, de Mathias Enard

Zonasin puntos, es lo primero que aprendes de la novela, que está compuesta por una sola frase, casi quinientas páginas de corrido, sin un punto, seguido o aparte, y claro, te llama la atención: Zona, se titula, lo firma Mathias Énard; lo coges con curiosidad porque no te lo terminas de creer pero vas pasando las páginas y sí, hay separación de capítulos y muchas comas y algunos punto y coma pero sigues sin ver ningún punto: un coñazo, piensas, y te acuerdas de Cristo versus Arizona, y de lo que te costó leerla en la adolescencia; es verdad que al principio esta también se hace dura, pero poco a poco entras en Zona y vas cogiendo la velocidad y el ritmo de la novela, no es fácil pero te enamoras un poco de Marianne, te fascinas con el paisaje, te horrorizas con la guerra de los Balcanes y te das cuenta de que el texto no es solamente un experimento formal vacío y sin sentido, que tiene dentro varias buenas novelas, una de espías, una historia del crimen en Europa, una historia de amor; Francis Mirkovic, el protagonista, en cuya cabeza discurre todo, viaja sentado en un tren con destino al Vaticano, un tren actual pero lento, que tarda varias horas en llegar a su estación final: ha perdido un vuelo, o no lo ha querido coger, lo único que le queda es ese tren nocturno que ha de tomar para entregar en la meta un maletín que contiene importantes documentos sobre crímenes de guerra en “la Zona”; durante esas horas recuerda su propia historia, nada limpia, y la va intercalando con un recuento desordenado de hechos violentos desde Napoleón hasta nuestros días, en una especie de Ilíada contemporánea, hasta que se cansa de pensar y se pone a leer y entonces, sí, aparecen los únicos puntos de la novela, que no son pausas en la corriente de pensamiento de Mirkovic sino la puntuación que pertenece al libro que está leyendo, porque después vuelve a cabalgar por las montañas de su monólogo interior y recupera la narración huérfana de pausas fuertes y llena de frases decisivas, de puñales literarios: como Celso Castro, te dices de repente, un poco más acusado en Mathias Énard, que tiene calidad de sobra pero en ocasiones se recrea demasiado, en todo caso ya te has venido arriba, uno de esos libros con los que arder o que arrojar al fuego, te animas, aunque si has llegado a ese momento ya no hace falta animarte, habrás pasado por Beirut y los Balcanes, por Mesopotamia y por Trieste, y si has sobrevivido a la falta de oxígeno en tu ritmo lector y a la violencia que destilan los episodios que narra Francis, entonces te dará igual con quién se compare o a qué te recuerde, que ya vas a llegar al final de Zona a toda costa e incluso te va a dar igual qué pase con el maletín cuando lo entregue o cómo amanecerá en el Vaticano cuando se presente allí, simplemente recordarás que te has pasado media noche en vela tragando páginas y cuando te has querido dar cuenta el libro yacía junto a ti y la alarma estaba sonando y eso sí que ha sido, amigo, un punto final de los gordos.… Leer la reseña completa del libro "Zona, de Mathias Enard" “Zona, de Mathias Enard”

Tokyo Zombie, de Yusaku Hanakuma

tokyo zombieLlevo muchos años aguardando el fin del mundo. Deseando que toda nuestra sociedad termine de una vez por todas, pero de una forma épica y memorable. Tras meditarlo detenidamente, y descartar varias opciones, he llegado a la conclusión de que un apocalipsis zombie daría ese toque de emoción a mi vida; a la de todos nosotros. A esas vidas que últimamente se han estancado en la más soporífera monotonía. El problema es que un mundo repleto de zombies es muy chungo, además de un muermo. O eso es lo que muchos autores de libros y cómics, además de directores de cine, nos han hecho creer.… Leer la reseña completa del libro "Tokyo Zombie, de Yusaku Hanakuma" “Tokyo Zombie, de Yusaku Hanakuma”

Un gran favor, de Joyce Maynard

Un gran favorLa amistad es un tipo de relación mucho más complicada y con muchos más matices y aristas de los que en principio creemos que puede tener. Como en cualquier otra forma de relación es particular, cada persona es un mundo y la relación que establece con otras personas también lo es. Cada pareja o grupo de amigos asienta su amistad en base a unos preceptos propios y únicos y, por eso, cada amistad es distinta. Aún así, como pasa con todo, por muy únicos y distintos que nos creamos, terminamos cayendo en la homogeneidad y uniformidad de la sociedad, repitiendo los mismos patrones de pensamiento y comportamiento que el resto.… Leer la reseña completa del libro "Un gran favor, de Joyce Maynard" “Un gran favor, de Joyce Maynard”

Manual de pintura y caligrafía, de José Saramago

Manual de pintura y caligrafía¿Qué somos sino nuestras elecciones? Nacemos, crecemos, conocemos gente y nos relacionamos con ellas y el mundo que nos rodea y vamos formando así un presente al que denominamos vida; algunos se encuentran contentos con su actualidad, pero otros, creo que la gran mayoría de este mundo, no. Podemos cambiar o quedarnos en la autocomplacencia, pero nadie puede afirmar que, si optamos por el cambio, ese tránsito hacia lo nuevo será definitivamente fácil. Todo lo contrario, lo bueno y lo real cuesta y mucho, porque no se ampara en la máscara o en la trillada y absolutamente ilógica frase “mañana comienzo una nueva vida” Cambiar una realidad que no nos llena es un camino por momentos tortuoso y Manual de pintura y caligrafía es la historia de un cambio no solo personal, sino también histórico.… Leer la reseña completa del libro "Manual de pintura y caligrafía, de José Saramago" “Manual de pintura y caligrafía, de José Saramago”

Seis de cuervos, de Leigh Bardugo

Seis de cuervosEra una tarde normal de un día normal (aunque muy caluroso) de finales de agosto, cuando entré, como de costumbre, en una librería a echar un vistazo de las novedades. Lo que no me esperaba encontrar apareció justo delante de mis narices en la sección juvenil. Un libro del que llevaba oyendo maravillas durante meses, con una puntuación de 4,43 sobre 5 en Goodreads y cientos de reseñas poniéndolo por las nubes. Por si no fuera poco, un libro que ha sido número 1 del New York Times y que ha estado más de 30 semanas en la lista de los más vendidos en Estados Unidos.… Leer la reseña completa del libro "Seis de cuervos, de Leigh Bardugo" “Seis de cuervos, de Leigh Bardugo”

Supervivientes, de Java Rosenfarb

supervivientesHace tiempo que no hablo de portadas, pues bien, la que ilustra este libro me gustó, me pareció una portada de un libro de poemas ¡Tan triste me parece y al mismo tiempo tan esperanzadora! Tampoco sabría decir porqué, desconocía el contenido, pero el libro definitivamente se vino conmigo. Se vino conmigo y se quedó en mi, en mi vida y como comprenderán no ha sido solo por la portada o por el continente, sino, naturalmente, una vez leído, por el contenido.

La ilustración de la portada, “Una primavera”, es una obra de Karl Bodek y Kurt Löw, y ha formado parte de una exposición que se realizó en Berlín con pinturas de Supervivientes del Holocausto.… Leer la reseña completa del libro "Supervivientes, de Java Rosenfarb" “Supervivientes, de Java Rosenfarb”

Una virgen imprudente, de Ida Simons

Una virgen imprudenteVendida como la Stoner holandesa, esta novela atrajo mi atención desde el primer momento. No sé si conocéis Stoner, de John Williams. Es un libro que leí hace un par de años y que me gustó bastante. En Stoner no ocurre nada y ocurre todo a la vez: el paso del tiempo, el devenir de una vida más o menos simple, el amor, las decepciones. Todo ocurre a un ritmo acompasado con el de la vida del protagonista. Y sin tener nada en especial es una novela que atrapa. Es cierto que Una virgen imprudente tiene muchas similitudes con Stoner: ambas son novelas cuyo equilibro baila al compás de la existencia del protagonista, una existencia que se nos presenta tal cual es, sin grandes ni arriesgados artificios literarios.… Leer la reseña completa del libro "Una virgen imprudente, de Ida Simons" “Una virgen imprudente, de Ida Simons”

Locas 2, de Jaime Hernández

Locas 2Como a Roma, son varios los caminos que conducen a la creación de un gran libro. Puede el autor, por ejemplo, proponerse escribir una obra maestra. Si se llama Joyce, Proust o Mann, puede, tras invocar a sus númenes, plantearnos profundas reflexiones sobre la memoria, el arte o la posmedernidad y el resultado se acercará bastante a la obra maestra. Por otra parte, el autor puede optar por olvidarse de la posteridad y escribir pensando en su público inmediato y en uno mismo. En ese caso, si tiene el talento suficiente, le bastará con llamarse Hernández, evocar el barrio donde creció y refocilarse en un culebrón de aquí te espero.… Leer la reseña completa del libro "Locas 2, de Jaime Hernández" “Locas 2, de Jaime Hernández”