Reseña del libro “Rasi en el hospital: La pandilla de la ardilla 1”, de Begoña Oro
¿Qué tendrán las ardillas que nos hacen reír tanto a niños y mayores? La primera vez que me topé cara a cara con una ardilla fue hace muchos años en Londres, en St. James’s Park. Esa ardilla era lo más: atrevida, inteligente y muy astuta. Nos cameló a mí y a mi mejor amiga para que la infláramos a comida. Tanto me enamoré de las ardillas en Londres que me compré una de peluche en Harrods.
El caso es que os hablo de ardillas porque recientemente ha llegado a mi casa Rasi, la ardilla protagonista del libro infantil que hoy os traigo: Rasi en el hospital, de Begoña Oro. Sí, la misma autora a la que ya leímos en Los desastres de Troti y Los Mug, atrapados en el móvil.
En esta ocasión, Begoña nos presenta la serie La pandilla de la ardilla, compuesta por Nora, Aitor, Irene, Ismael y Rasi, la ardilla. Una serie enfocada a peques mayores de siete años. No obstante, os puedo decir que mi hija tiene cuatro años y ha disfrutado muchísimo con esta aventura, ya que aunque aún no sabe leer frases completas, es un fantástico plan el que mamá y peque lo lean juntas, como hemos hecho nosotras.
Además, las divertidas ilustraciones de Dani Montero llenan las páginas acompañando al texto de Begoña Oro, y de esa forma los peques de la casa pueden imaginarse perfectamente lo que les ocurre a nuestros protagonistas en cada capítulo.
En esta aventura, Irene, una de las niñas de la pandilla, se tuerce la muñeca, por lo que tienen que llevarla al hospital para hacerle pruebas y ponerle una escayola. Para que Irene no se sienta sola, Rasi la acompaña y al mismo tiempo nuestra pequeña ardilla aprende un montón de cosas sobre los hospitales, lo que hacen allí los médicos, y lo que se esconde en algunas salas.
Rasi se perderá en el hospital, pero como no hay mal que por bien no venga, eso hará que aprenda muchas cosas importantes sobre lo que allí encuentra.
Yo solo os puedo decir que a mí y a mi hija nos ha encantado conocer a Rasi y vivir la experiencia de visitar el hospital junto a ella. Más que nada porque, como todos sabemos, a los niños no les suele gustar nada tener que ir al médico, y menos si es por una urgencia, por una caída aparatosa o porque se hayan roto algún hueso. ¡Os lo digo por experiencia!
Sin embargo, si experimentan esa visita al hospital desde fuera junto a una protagonista tan salada como Rasi, el miedo empieza a evaporarse. De hecho, ahora la mía está deseando que la llevemos a alguno para pasarlo tan bien como lo pasó Irene apoyada por Rasi.
Y es que eso es lo importante también, que los peques tengan algún muñeco al que poder llevar con ellos para que les de ánimo y fuerzas en un momento como ese. Sin duda y gracias al peluche de Rasi que venía en el pack que incluye Rasi en el hospital y ¿Dónde está Rasi?, mi hija ya tiene aliado si tenemos que visitar al médico.