El harén del Tibidabo, de Andreu Martín

El harén del TibidaboEl catálogo de la editorial Alrevés puede presumir de contar con muchos de los mejores escritores de novela negra en español. Y a esta plantilla de “galácticos” se une ahora Andreu Martín, que lleva desde finales de los años 70 cultivando este formato, dentro de su extensa bibliografía. Tantos años de incansable trabajo le han convertido en todo un maestro del noir español, cargo que le otorga tanto la crítica como los propios escritores de dicho género.

El harén del Tibidabo nos traslada a los pies de esta montaña barcelonesa para conocer toda una institución en la Ciudad Condal, un prostíbulo de lujo cuyo origen se remonta a los tiempos del Franquismo. Este templo de lujuria y placer parece tener un ecosistema propio. Sus salas temáticas, sus ritmos de vida entre las trabajadoras y el buen trato hacia el cliente parece formar un engranaje perfecto a los mandos de su peculiar dueño, Mili (Emilio) Santamarta. Mili vive encerrado dentro de su burdel desde el día en que su madre, la anterior dueña, le abandonara a él (y a su empresa) sin razón aparente. Pero diez años después, esa reclusión se rompe tras aparecer muerta su progenitora con dos disparos en la nuca, acto que le valdrá a nuestro protagonista para indagar más en el pasado de su madre, y averiguar el porqué de su terrible muerte.

Cuando uno disfruta o sufre con una de sus lecturas, los motivos pueden ser varios. En este caso, el motivo del disfrute tiene nombre y apellidos: Mili Santamarta. Andreu crea un personaje único, con una personalidad contundente y arrebatadora de la que he quedado fascinado. Cuanto más conoce uno de él, más atrapado se siente. Además, como en las buenas historias, la emoción, la trama, la acción y la intriga van de menos a más. Según se agranda el personaje de Mili, la novela va ganando en calidad, evidenciando el autor una maestría especial en el manejo de este tipo de historias.

Andreu Martín nos lleva dando tumbos junto a Mili por Barcelona buscando restos del pasado de su madre, que se vuelve más turbio cuanto más conocemos del mismo. ¿Ángel o diabla? Es difícil quedarse con uno de los dos perfiles para su hijo, cuya fe inquebrantable en su madre se tambalea. Además, tiene que lidiar también con una banda de proxenetas que quieren comprar el harén, aprovechando los momentos de zozobra de su dueño. Y mientras todo esto pasa, descubrimos una Barcelona oculta, clandestina. Una ciudad plagada de bandas satánicas, de templos de sadomasoquismo y de crueles mafias de explotación sexual. Nada que ver con la tranquila joya mediterránea visitada por millones de turistas.

La figura de Mili no es lo único que reseñar positivamente en la obra. El harén del Tibidabo también destaca por el lenguaje irónico y mordaz utilizado por Andreu. En sus páginas hay mucho humor (negro, como debe ser) y espacio también para la literatura de alto nivel. Y sirva como ejemplo el capítulo 34 de este libro, una obra maestra narrativa digna de admiración.

Satanismo, explotación sexual, sadomasoquismo, sangre, sexo y muertes, muchas muertes. Andreu Martín elige todos los ingredientes necesarios para hacer el noir perfecto. Y el resultado, de la mano de un gran Mili Santamarta, es más que sobresaliente.

César Malagón @malagonc

4 comentarios en «El harén del Tibidabo, de Andreu Martín»

Deja un comentario