De Cine y Literatura 48

De cine y literatura 48: Crepúsculo

crepusculotwilightTítulo: Crepúsculo
Autor: Stephenie Meyer
Editorial: Alfaguara
Páginas: 512
ISBN: 9788420469287


Película: Crepúsculo (original: Twilight)
Año: 2008
País: EE.UU
Reparto: Robert Pattinson, Kristen Stewart, Cam Gigandet, Billy Burke, Peter Facinelli, Elizabeth Reaser (et. al)
Duración: 122 min

 

Puede que esta sea la opinión sobre adaptaciones cinematográficas más fácil que voy a hacer en lo que va de incursión en este apasionante mundo. Antes de empezar debo reconocer que no soy un admirador de pura cepa de esta novela. De hecho, casi diría que me la leí por obligación, por trabajo quiero decir, y cuando terminé, hubo algo que me escocía, porque para mí el mundo de los vampiros se parecía más al de “Drácula” que al de los Cullen. Y precisamente por eso, porque el otro día discutía con un amigo sobre la necesidad de comparar estas dos historias, me he puesto con esta adaptación. Así de fácil, así de sencillo.

 

Lo primero que habría que decir sobre la adaptación de “Crepúsculo” es que es correcta. De hecho casi diría que hubiera sido un tremendo error no copiar, parte por parte, lo que aparece en el libro. Todos esperábamos ese momento en el que Edward entrara por primera vez en el instituto, todos esperábamos los pensamientos de Bella ante el enigmático personaje, y unas cuantas cosas más del libro que no destriparé por si alguno de vosotros todavía no lo ha visto. Por eso, quizá, la adaptación es perfecta, casi diría que es una novela en imágenes muy bien diseñada. Así que seamos benévolos, y démosle un 10 por, aunque sea, hacernos vivir lo mismo que vivimos en el libro.

Pero si hay algo que me repatea especialmente en algunas adaptaciones es que no se cuiden especialmente aspectos técnicos de base: la fotografía (que, lo siento por los admiradores, pero me pareció sosa a más no poder); la música (las partes solamente acústicas no tenían la relevancia que merecían, es curioso que luego oyeras la banda sonora y aparecieran grupos que jamás te esperabas encontrar en ella); y algunos efectos especiales eran, demasiado simples, es la palabra que me viene a la mente (lo siento, pero ese momento del brillo de la piel de Edward lo hubiera hecho mejor yo con el Paint, poco creíble). Por eso al final acaba decepcionando, en parte, una historia que con todo el éxito que ya llevaba cosechado, podía haber dado mucho más.

Con todo ello, diréis, ¿para qué narices nos habla de una película que no te ha gustado? El quid de la cuestión es que sí, me gustó, me hizo pasar un rato agradable, de esos de no pensar que a veces nos vienen tan bien. No seré yo quien eleve esta historia a la cima de las adaptaciones, pero hay que reconocerle el mérito de haber llevado al público joven a dos de las artes más denostadas de los últimos tiempos: la literatura y el cine. Sólo por ello, quizá merezca un premio, aunque sea pequeñito.

Trailer de la película:

BSO de la película:

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