Reseña del libro “Bruma Roja”, de Lucía G. Sobrado
Hace años buscaba sin cesar un retelling de Caperucita Roja, hasta que decidí darme por vencida. Y… de repente, cuando apenas pensaba en ello… ¡bum! Me topé de narices con Lucía G. Sobrado y su Bruma Roja, el comienzo de una bilogía que aporta un chute de adrenalina para todos los que amamos el romantasy, mi género favorito, ese que combina la fantasía con el romance proporcionándonos protagonistas fuertes y luchadoras y crushes feroces con su corazón blandito.
En verdad, Bruma Roja ha sido todo un descubrimiento. Una novela que ha cumplido todas mis expectativas y me ha dado todo lo que siempre espero en una historia de este tipo: una trama adictiva, una narración que vaya de menos a más aumentando la tensión en cada capítulo, personajes con sus virtudes y sus defectos, romance y una ambientación de lujo. Así que no os haré esperar más y os hablaré un poco de lo que podéis encontrar dentro de este oscuro cuento de hadas que se entremezcla con otros tantos…
Roja no es la típica joven desvalida, inocente y sencilla que esperaríamos. No. Ella es una cazarrecompensas con un gran secreto: Roja esconde una gran bestia en su interior que la transforma en algo muy difícil de controlar. Sin embargo, cuando el apuesto Lobo, un hombre de ardiente ojos amarillos, la reta para acabar con la horrible Hada Madrina, la villana que conjuró la bruma que provocó que todos los habitantes de Fabel olvidaran lo que fueron, Roja deberá enfrentarse a sus propios demonios, hacer de tripas corazón y aceptar el reto. Un desafío, un viaje, un mano a mano que transformará el odio que hay entre Roja y Lobo en algo mucho más… feroz.
Feroz, fiero, cruel, despiadado… Así ha sido siempre el lobo del cuento que tanto conocemos. Pero en este nuevo giro de tuerca, me atrevo a decir que es más feroz incluso nuestra particular Caperucita que el propio lobo. Digo esto porque Roja es un personaje espectacular, una mujer llena de luces y sombras, hermosa por fuera y peligrosa por dentro, tal y como una rosa con sus espinas. Pero si nos ceñimos al mundo real, ¿qué mujer no es así? Todas somos Roja. Todas tenemos nuestro lado bello y tierno y ese otro que ruge, que lucha y que saca las garras cuando hay que hacerlo. Todas escondemos una loba en nuestro interior, y no solo porque lo diga Shakira, que también, sino porque las mujeres hemos aprendido a lamernos las heridas, a sacar fuerzas de donde no las hay y a mirar hacia delante. Y Lucía G. Sobrado no podría haberlo hecho mejor al crear una protagonista como Roja, que refleja tan bien la esencia de las mujeres de hoy en día. Roja es independiente, decidida, tenaz y mordaz, pero sobre todo no se muerde la lengua ante nada ni nadie. Además, me ha conquistado que su bestia sea también como una voz de la conciencia, visceral pero que la ayude a recordar quién es y sobre todo quién ha sido —algo de suma importancia en la novela, tanto para Roja como para el resto de personajes—. Pero lo mejor es que cuando su bestia interior se hace con el poder, es mucho más temible que el lobo más sangriento.
Y hablando de lobos… nuestro protagonista masculino es la otra cara de la moneda de esta historia. Es un granuja desvergonzado con una lengua muy afilada y una mirada capaz de derretir a cualquier doncella. Pero, claro, ya hemos dicho que Roja no es una joven desvalida, y el enemies to lovers que hallamos aquí es toda una delicia para los que disfrutamos con este cliché.
No obstante, y a pesar de ser una novela que se centra principalmente en Roja y en su relación de amor-odio con Lobo, también es una historia que nos presenta en bandeja de plata a otros personajes de cuentos de hadas que nos iremos encontrando por el camino. Por lo que el elenco con el que nos topamos, aunque esté en segundo plano, llega a convertirse en algo muy interesante y memorable. Asimismo, las descripciones que nos regala la autora son espléndidas, todas ellas narradas con un toque exquisito, oscuro y atrayente que me ha transportado de lleno a Fabel.
Eso sí, me ha faltado un mapa. Y tal vez me hubiera gustado que la misión de Roja hubiese tomado más protagonismo. Aun así, Bruma Roja es un primer volumen de bilogía que me ha fascinado y ansío con muchas ganas devorar su continuación y adentrarme en ese Reino Feroz.