El alquimista entre las fuentes

Reseña del libro “El alquimista entre las fuentes”, de Roberto Losa

El alquimista entre las fuentes

En la literatura me gusta el riesgo. Detesto el tedio en el que nos sumergen ciertos escritores que consideran al lector como un simple sujeto pasivo. De esto, precisamente, sabe mucho el autor de la novela que hoy reseño. Roberto Losa arriesga en el formato, pues nos presenta una novela híbrida a caballo entre la ficción histórica y la novela negra. Pero es que, además, consigue hacernos partícipes de la trama desde el primer momento, logrando sumergir al lector de manera activa en esta historia repleta de intriga y emoción. Tanto es así que yo, que no soy una lectora habitual de ninguno de estos dos géneros, he disfrutado muchísimo dejándome llevar por su nueva novela, El alquimista entre las fuentes.

Leemos en la contraportada que estamos ante una novela de ficción histórica con mucho de intriga o tal vez una novela negra ambientada en el siglo XVIII. Sea lo que fuere, el autor rehúye de los manidos tópicos de la novela histórica y nos regala una historia que, si bien no pierde en ningún momento el rigor, no deja de ser la ambientación para ofrecernos la verdadera trama de esta novela tan noir.

El alquimista entre las fuentes nos lleva al año 1786 para presentarnos a Santos Aguña, un hombre con un pasado de no demasiada buena reputación que espera encontrar ahora, alejado de sus antiguos asuntos, la redención y la calma que no encontró antes. Sin embargo, la llegada de un sobre lacrado con el sello del Consejo de Castilla hará cambiar sus apacibles planes. Requieren su inmediata presencia en el Real Sitio de San Ildefonso. El Rey Carlos III está a punto de llegar para pasar allí los meses de verano y necesitan del ingenio y la falta de escrúpulos de Santos Aguña para resolver una serie de siniestros acontecimientos antes de que la familia se instale en tierras segovianas.

Una vez allí, Santos Aguña es recibido por el conde de Campomanes quien le explica que unos días atrás apareció el cadáver de una joven en San Ildefonso. Antes de que el rey y su familia lleguen, el culpable debe ser atrapado y ajusticiado. Pronto descubrirá que son tres los cadáveres encontrados en un mes y que esta despiadada carnicería no ha hecho más que comenzar.

Guiándose por su excelente intuición y su carisma, Santos Aguña comienza a adentrarse en los secretos que rodean a esta serie de macabros asesinatos. Por supuesto, no va a ser un camino de rosas. El autor de los crímenes no es un cualquiera. Todos los asesinatos, metódicos, tienen un simbolismo. Están ante un asesino leído y cultivado que les hace llegar sus propias misivas para complicar aún más todo.

Cada vez queda menos tiempo para que llegue el rey y su familia. Santos Aguña, con su fiel criado Veleto y el alférez Fagoaga, contarán también con la inestimable ayuda de la hermosa Catalina, sobrina del intendente.

Por supuesto, en las páginas de El alquimista entre las fuentes hay mucho más. Hay amistad, acción, amor y traiciones. Hay secretos, misterios y luchas de poder. Pero, sobre todo, hay mucho ingenio en esta novela. Roberto Losa hace gala de una lucidez exquisita tanto en el planteamiento como en el desarrollo de la novela. Consigue, sin duda, su objetivo: mantenernos enganchados a la historia haciéndonos participes de la trama. Y lo hace con un estilo elaborado, minucioso y ágil. Una ejecución brillante para una idea muy original que no podéis perderos.

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