En Lake Success

Reseña del libro “En Lake Success”, de Gary Shteyngart

En Lake Success

Quizá no sea el de Gary Shteyngart el primer o el segundo nombre que nos venga a la cabeza cuando alguien pregunte por un novelista que le haya tomado bien el pulso a la actualidad estadounidense en las últimas dos décadas. Porque es raro que lo haga un ruso de nacimiento como él, porque sus novelas no han sido grandes éxitos comerciales en el mercado de lengua española, porque tiene un apellido endiabladamente raro, quizá. Y sobre todo porque sus libros tienen dos características diferenciales que los alejan de los cánones: el punto de vista y el humor.


Al igual que en anteriores libros de Shteyngart, los protagonistas de En Lake Success son inmigrantes, en este caso de segunda o tercera generación. Nacidos en Estados Unidos, plenamente yanquis, pero todavía con una educación y una mentalidad que los hace proclives a la extrañeza, a mirar más allá. En lo tocante a sus orígenes, hay algo básico que separa este libro de otros: no se habla aquí de la lucha por la supervivencia, de la inmigración ilegal y los contratos basura. Aupados en las conquistas de sus padres, los protagonistas de esta historia ya han conseguido llegar muy arriba en la escala social y tienen unas preocupaciones bastante distintas de las de la generación anterior. Medrar, enriquecerse. Y sobre todo no cagarla. Se podría resumir en, como cantaban Los Planetas en Islamabad, antes no le temía a nada y ahora le temo a perderlo todo.


Ese motor es el que mueve a los dos personajes principales, Barry y Seema, que separan sus caminos después de una discusión en una cena con amigos en su bloque de apartamentos de lujo frente a Central Park. Él, un gestor de fondos de inversión, ha visto cómo la vida que soñaba con alcanzar está cada vez más lejos. La justicia le investiga por uso de información privilegiada, ha perdido millones de dólares en una operación ruinosa, no sabe cómo afrontar el autismo de su hijo. ¿Qué se le ocurre? Dejarlo todo, quemar sus tarjetas de crédito y embarcarse en un rocambolesco y deprimente viaje en autobús en busca de su novia de la universidad, Layla. Por su lado, sola en Nueva York con el niño y con la posibilidad de un nuevo amante flotando alrededor y su madre recordándole todo lo que ha hecho mal, ella se pregunta si a sus veintinueve todavía tiene tiempo de reiniciarlo todo, de dejar de ser mujer florero y recuperar su carrera profesional, aunque tampoco tiene nada claro cómo llevarlo a cabo ni cómo encajar en el plan a un hijo con “espectro”, como lo definen sus médicas.


El segundo hecho diferencial en Shteyngart es el humor. Ese ácido, absurdo, punzante humor que ha cultivado siempre, que en Absurdistán recordaba inevitablemente a Borat y que aquí estira hasta el paroxismo en su crítica de la cultura de la búsqueda de la ultra riqueza y en su retrato de lo que llaman “América profunda”.


Apoyada en estos dos pilares, la mirada desde fuera y desde dentro a la vez, la franqueza que solo podemos encontrar a través de la ironía y el sarcasmo, En Lake Success es una novela tan divertida como profunda. Situada en el punto álgido del Make America Great Again, con Donald Trump ascendiendo los últimos peldaños en su camino hacia la Casa Blanca, Gary Shteyngart aporta muchísimas más claves sobre la fanatización del país con su caricatura que cualquier analista, de manera que al terminar la lectura lo que nos preguntamos, más que por qué, es cómo no había ocurrido antes algo parecido.

Deja un comentario