Reseña del libro “Los migrantes”, de Marcelo Simonetti & Maria Girón
Hay ocasiones en que al abrir un libro habiendo leído sólo su título, nos hacemos una idea previa sobre lo que vamos a encontrarnos en él. En el caso de Los migrantes, escrito por Marcelo Simonetty e ilustrado por María Girón, podríamos pensar que es el típico libro en el que nos van a hablar sobre qué es ser un migrante, pero no, la originalidad está aquí presente cogida de la mano de la inocencia infantil, que más nos valdría tomar todos como ejemplo a seguir, ya que así las cosas en este mundo irían mejor.
Pauli y su hermano gemelo (del que no conoceremos su nombre) terminan las clases con la sorpresa de que al día siguiente llegarían dos migrantes. Ellos, que no saben lo que significa esa palabra, empiezan a elucubrar sobre qué podría ser. Le dan vueltas al asunto (sin preguntar a un adulto, que dicho sea de paso sería lo más lógico) e imaginan que podrían ser pasteles para repartir entre todos los alumnos, o mascotas con las que jugar. Pero tras descartar esas posibilidades, cuando se van a la cama a descansar, su imaginación se desborda y cada uno, arropado por las mantas y sus pensamientos, imaginará una catástrofe distinta relacionada con eso que se llama migrantes.
De camino al colegio, en el coche, no se atreven a preguntar a su madre qué podrían hacer para enfrentarse a Los migrantes, y no lo hacen porque a esas alturas creen que podrían ser algo así como fantasmas y a su mamá le dan mucho miedo esos seres.
Cogidos de la mano se adentrarán en el colegio y de camino al aula, mirando al cielo, piensa algo que me ha parecido de una inocencia abrumadora: es un bonito día para morir. Pero no están dispuestos a hacerlo tranquilamente, se enfrentarán a Los migrantes como mejor puedan.
Su sorpresa al llegar a clase es que se encuentran con dos nuevos alumnos: Etienne y Florence. Un chico y una chica con dientes muy blancos y rizos pequeñitos en el pelo, con los que rápidamente entablan una bonita amistad. Los migrantes ya no serán ningún problema porque los cuatro forman un gran equipo y juntos pueden con todo lo que los pueda amenazar.
Os he resumido la historia en pocas palabras para que entendáis el importante mensaje que nos da el libro: el miedo a lo desconocido nos puede paralizar y hacer que no disfrutemos de la vida. Estos niños, Pauli y su hermano, podrían haber preguntado, haber salido de dudas sobre qué es eso de Los migrantes, pero prefirieron no hacerlo por miedo a causar, precisamente, más miedo. Lógicamente, si no sabes a qué te enfrentas, no vas a poder defenderte en caso de que te ataquen. Y, es más, si no sabes a qué te vas a enfrentar, te puede ocurrir como a ellos y cuando tienes, finalmente, ante tus ojos esa terrible amenaza, no la vas a reconocer, así que la situación se convertirá en algo totalmente sin nada fuera de lo corriente.
Al final, sólo son dos niños que conocen a otros dos niños que han llegado nuevos al cole. Por cierto, eso sí que podría dar miedo, llegar nuevo al cole, hacer nuevos amigos, enfrentarse a una nueva vida…pero esta situación será mejor abordarla en otro libro.
Los migrantes es una bonita historia para leerla con ojos de niño y para hacerle llegar a éstos un mensaje de que el miedo lo creamos nosotros con nuestra imaginación. Respeto e inocencia, que gran regalo nos da Kalandraka editora en otro de sus libros para soñar.