Reseña del libro, No puedo más, de Hija del mal
¿Cuántas veces nos hemos visto atascados en la vida y hemos dicho eso de, ¡ya basta! ¡No puedo más!?
Vivir no es fácil. Al que se lo parezca que levante la mano.
No puedo más es un libro muy especial porque así de especial es la autora.
Siempre he dicho que es mi sobrina más creativa, pero serlo, como bien dice Rosa Montero, y muchos profesionales de la salud, así como también creemos lectores y escritores, suele tener un precio o peaje.
Quienes conocen a M. M. H., llamada en el ambiente artístico Hija del Mal, me entienden, y en su libro, tan delicado, tan duro, tan inteligente y tan lleno de dolor y de vida, podemos verla.
No puedo más son reflexiones de momentos durísimos, de sentimientos desgarradores, de ansiedades por fin reconocidas, una exploración del yo más íntimo, pero al mismo tiempo una forma de ayuda para quienes están atravesando algún tipo de desierto y no ven salida.
El diseño acompaña al texto y el texto al diseño, que como ya adelanté en mis RRSS es de una finura y belleza reconocible de forma inmediata, la sencillez hecha Arte.
El marcapáginas que venía con mi libro es una Master Class de diseño completo y de altura, tanto el anverso como el reverso, en el que hay unos suaves y finos marcadores que puedes desprender para dejar señaladas aquellas partes a las que seguro que desearás volver.
Imágenes, frases, cartas, versos, cuentos, ilustraciones…, y todo ello a través de un lenguaje poético en el que siendo ella misma se entrevén aquellas lecturas tempranas de su adorado Alan Poe. Y probablemente, aun cuando ella pudiera no saberlo, de Machado, al que habrá leído mucho menos, pero todo lo profundo nos deja marca en nuestro camino por la vida. Conmigo ha viajado a Soria y ha recorrido los caminos por los que anduvo el Viejo Profesor en sus mejores momentos pero también en sus días de desesperación… y eso suele dejar posos en nuestra mente como cuando nos dice: “Cada vez que me lees estás robándome…”, yo no he podido evitar que mi mente viajase a esos versos que decían “al cabo nada os debo, me debéis cuanto escribo…”.
Es una auto publicación, pero dado el valor que tiene tanto su última página como la contraportada, debería estar subvencionada por el Ministerio de Sanidad o la Consejería de Salud, leído por jóvenes y visible en Institutos…
Todos tenemos que aprender a mirar más de cerca a quienes nos rodean, ver cuando a nuestro lado puede haber una persona que esté pensando eso de “No puedo más“, y hasta aquí he llegado.
Sabemos que muchos no han encontrado salida en momentos de absoluta oscuridad, o la vía de escape que nos ofrece la literatura. Muchos conocemos a alguien que ha tenido familiares o amigos que no han podido más, quizás, sólo quizás, este libro le de la solución anticipada a quien no es capaz de encontrarla, a quien no haya pensado que los profesionales están para ayudar y la familia y amigos para acompañar.
Así que comparto con todos vosotros esta reseña porque creo sinceramente que el libro merece ser leído y compartido, por sus versos, porque sé que es un libro que puede ayudar, que con ese fin se ha escrito, ayudar y ayudarse, querer y quererse, que difícil explicar que la vida está llena de momentos en los que todos pensamos que No podemos más.
No puedo más, es en conclusión un acto de amor, es un acto de generosidad inmenso, es explicar desde el dolor propio las posibles salidas para no caer de ese fino hilo por el que andamos durante la vida.