Acababa de regresar de pasar unos días en París cuando vi este libro entre las novedades. Volvía, una vez más, enamorada de esa ciudad y de todos los buenos momentos que allí he pasado. Así que, encontrarme con este libro fue una especie de bote salvavidas, la forma perfecta de seguir viajando por sus calles y quedarme un poco más en la ciudad de la luz. No lo dudé. Seguí viajando de la mano de Mathias Malzieu, esta vez de una forma completamente diferente y bastante más fantástica. Pero dejadme que os cuente.
Una sirena en París no es el primer libro de Mathias Malzieu, el conocido músico francés del grupo Dionysos. En 2003 publicó 38 mini westernes, en 2005 La alargada sombra del amor y en 2007, con La mecánica del corazón, cosechó muchos éxitos e incluso fue adaptada al cine por Luc Besson, Entre sus obras mas recientes están Metamorfosis en el cielo (2011), El beso más pequeño (2013) y un libro autobiográfico titulado Diario de un vampiro en pijama (2016). A pesar de conocer su música desde hace bastante tiempo, nunca antes había leído nada de Malzieu, pero tengo la sensación de que es un hombre todoterreno que todo lo hace bien.
En cuanto a Una sirena en París, os diré que no suelo leer novelas de género fantástico. Suelo ser más de darme de bruces con la cruda realidad, pero tengo que admitir que leer este libro ha sido todo un acierto. Qué bien sienta alejarse un poco de tanta dosis de realismo y adentrarse en un mundo lleno de fantasía e imaginación como el que ha creado el autor en las páginas de este libro.
En esta novela, Malzieu recrea una situación bastante improbable. Durante un mes de junio, un aguacero cae sobre París y las aguas del Sena comienzan a subir para asombro de todos los parisinos y visitantes. Tanto es así, que la subida del Sena amenaza con inundar las calles de París. Hay personas desaparecidas y el caos empieza a reinar. Pero para Gaspard Snow, un original músico en apuros, todo esto no tiene tanta importancia. Él continúa recorriendo su ciudad en patines, yendo de su pequeño apartamento al Flowerburguer, la barcaza de su abuela que está atracada en los canales de París y en cuyo interior se esconde todo un universo aparte.
Una noche, en uno de esos paseos, Gaspard se siente atraído por un canto irresistible que proviene de las orillas del río. Se acerca hasta allí, fascinado por esa melodía singular y descubre a Lula, una sirena malherida. Lo imposible se vuelve entonces tan real como la fascinación que Gaspard siente por esa hermosa criatura y decide llevársela a su pequeño apartamento para curarle las heridas y poder devolverla al mar. Pero, tras haberla instalado en la bañera de su casa, Gaspard no contaba con que hay algo en Lula que lo atrae irresistiblemente. ¿Sentirá Lula algo parecido o estará deseando volver a su lugar? Lo que sí acaba por descubrir Gaspard es que todos los hombres que oyen el canto de Lula mueren en menos de tres días y que la sirena, fuera de su hábitat, tiene el tiempo contado.
Una sirena en París es una hermosa fábula contemporánea, llena de fantasía y de imaginación. Me ha recordado, en cierto modo, a aquella maravillosa película de Guillermo del Toro que es La forma del agua y he vuelto a enamorarme, gracias a este libro, de las historias fantásticas y de mi querida París. Si os apetece viajar lejos os recomiendo mucho esta novela. Como os decía antes: qué bien sienta dejarse llevar, de vez en cuando, a otros mundos fantásticos de la mano de libros como este.