Hasta nunca, Peter Pan, de Nando López

Hasta nunca, Peter PanNo hace mucho tiempo (aunque ahora el tiempo es tan relativo) que reseñé En casa me lo sabía, una de las últimas novelas del autor del que hoy os hablo. A Nando lo conocí en Twitter, donde es bastante activo. Coincido con su forma de ver la educación hoy en día y tiene bastante arte a la hora de escribir tanto tuits más serios como aquellos que te sacan una carcajada. Además, siempre estaré en el mismo bando de alguien que defienda con tanto ahínco la educación, los valores de la adolescencia y los derechos de los colectivos LGTBI.

Por eso mismo me lancé a leer Hasta nunca, Peter Pan, la última novela de este novelista, dramaturgo y doctor cum laude en Filología Hispánica que ha escrito numerosas obras, tanto juveniles como para adultos, y que ha ganado varios premios, entre ellos, con La edad de la ira fue finalista de premio Nadal en 2010.

Ya que conozco su faceta más gamberra, esta novela dirigida a un público adulto y que se vende con el lema de “un libro que será para quienes hoy tienen 40 lo que fue Friends cuando tenían 20” era la mejor oportunidad para conocer al Nando que escribe sobre otro tipo de temas. Todavía no he alcanzado la cuarentena, aún ando en los treinta y pocos, pero sí que me declaro fan absoluta de Friends y recuerdo ver la serie, no con 20, pero sí cuando salía del instituto y había terminado de comer.

En Hasta nunca, Peter Pan, Nando López nos cuenta la historia de David, uno de aquellos adolescentes que en su día vio Friends y que, a día de hoy, en sus cuarenta y dos, se halla inmerso en una crisis existencial de las gordas: la relación con su novia se rompe, su círculo de amigos ya no es el que era y su vida laboral actual no es lo que él había soñado que sería. Quitando esta última parte, el resto de problemas, cómo podéis ver, bien podrían ser los problemas de un adolescente, ¿no os parece?

El punto de inflexión en esta crisis existencial se lo regala su perfecta hermana Bea cuando decide irse a Japón durante seis semanas por temas laborales y le deja a su cargo a su hijo Unai, un adolescente de dieciséis años con el que David no ha mantenido mucha relación y que vendrá a poner patas arriba ese universo en descomposición en el que se haya sumergido el protagonista.

En palabras del autor, este es un relato protagonizado por la generación a la que el mismo pertenece, así que hay mucho de él en esta “generación atrapada entre una adolescencia eterna y un presente adulto que parece agrandar a cada paso la distancia entre lo que soñamos ser y lo que hoy somos”.

Narrada con humor, delicadeza y muchas dosis de realismo, esta historia que se mueve entre la convivencia del protagonista y su sobrino y la llegada de Laura, una directora de cine que cuenta con David como ayudante de dirección en su siguiente proyecto podría ser la historia de muchos de nosotros.

Hasta nunca, Peter Pan es una novela diferente que se desarrolla entre esos dos mundos que os comentaba: el teenager y el adulto, dos mundos que tienen más en común de lo que a primera vista parece. He disfrutado, sobre todo, con las referencias cinematográficas que aparecen en la novela y, he de confesar que, mientras la leía, me he sentido también un poco Peter Pan.

Deja un comentario