Novedades infantiles 19
Los libros infantiles nos descubren, una vez más, que pueden convertirse en un refugio perfecto para ese frío helador que atrona al otro lado de la ventana. Por eso, una vez más, presentarme aquí y presentar a todos vosotros las novedades infantiles que han llegado a mis manos y que he disfrutado como si no hubiera un mañana, como si el hoy fuera siempre y como si las historias que en sus páginas se guardan fueran aquellas en las que perderme una y otra vez, sin remisión alguna. Pero, por supuesto, aunque yo viva eso, no quiere decir que el público deseado sea el adulto, porque en realidad yo soy un niño pequeño, todavía lo soy sí, en el cuerpo de un adulto que mira la vida, que mira los libros, que observa las estanterías de las librerías como lo que realmente son, y nunca debieron dejar de ser, y es un tesoro que guarda, en su interior, bellas historias que nos acompañarán a lo largo de toda la vida. ¿Queréis descubrirlas conmigo? Aquí van las de hoy.
Qué ciertas son esas palabras con las que este cuento acaba. Esas palabras que nos exhorta a comprender que de las personas especiales se aprenden cosas especiales. Y es que Una rueda de camión, una aleta de tiburón y el parche de un pirata con pata de hojalata es uno de esos textos en los que perderse una y otra vez, en el que la mirada de un niño, esa mirada que no se encuentra contaminada por la mirada que los adultos poseemos, contiene tanta sabiduría que nos hará aprender tantas cosas, tantas cosas inevitables, tantas cosas imprescindibles, que sería un auténtico pecado perderse esta historia que nos abraza, que nos infunde magia, y que se mete en nuestro interior para no perderse nunca, para ser recordada, con esa pasión con la que los lectores pueden convertir una historia en eterna, la pueden hacer respirar y susurrarnos a través de las páginas, acompañándonos por la vida mucho más allá de la última página que se cierra y nos indica el final de una historia. Una historia sorprendente, que se disfruta y se siente con todos los poros de la piel. (Para lectores de 7 a 9 años)
Hay veces que, cuando uno se para a pensar, a mirar en ese horizonte que tenemos a lo
lejos, va creando en su mente los movimientos de los personajes de una historia que acaba de leer. Con Roc escribe una historia uno se convierte en el protagonista especial de una historia que nos cuenta cómo un perro busca la inspiración y empieza a escribir una historia, esa historia que siempre ha querido contar y a la que le llegará un final perfecto. Pero junto a esa imaginación, nos encontramos con una historia sobre la amistad, sobre conocer a las personas, sobre la literatura, sobre cómo la musa, esa que se posa en nuestro cuerpo y nos llena de imaginación para escribir, hace de las suyas y acaba convirtiendo una simple idea en una historia completa. Un lujo de libro, un lujo de historia, y una mirada, la de este perro, que enamora desde el primer momento en que decide que, como no podía ser de otra manera, quiere ser escritor porque a él le encantan y son un tesoro valiosísimo. (Para lectores de 5 a 7 años)
Y después, cuando va pasando el tiempo, cuando vamos creciendo (ya lo dije en otra reseña) hay algo que va instalándose en nosotros: el miedo. Así que, ¿por qué no dar la espalda al miedo y convertirnos en valientes, en personas con una fuerza increíble que no sintamos miedo, o que si lo sentimos no nos paralice? El libro valiente es, pues, el antídoto perfecto para todos aquellas ideas, aquellos pensamientos, aquellas emociones que se dan la mano con el miedo, para entender que por mucho que el miedo sea algo natural, esté dentro de nosotros dispuesto a saltar por cualquier motivo, somos nosotros los que tenemos en nuestras manos salir airosos de esa situación. Una oportunidad esta que nos permite viajar por la vida, entender lo que es el miedo, y encontrar las soluciones que, tras mucho pensarlo, siempre han estado ahí con nosotros, y podíamos haber estado demasiado ciegos para no verlas (Para lectores de 6 a 8 años)
No existe sección infantil sin su pequeña dosis de fantasía. Y así es como entra en escena
Ever After High: el libro del destino para endulzar nuestro cuerpo y nuestra mente con la dosis necesaria de fantasía que todo niño y niña debe encontrar en los libros. Una historia como pocas, épica casi me atrevería a decir, que nos envuelve en los destinos de dos personajes de los que todos hemos oído hablar, de los que se han hablado en numerosas ocasiones, pero que aquí aparecen de otra manera, de otra forma mucho más jugosa, convirtiendo esa fantasía de la que hablaba antes en puro disfrute, en diversión, en un espacio de satisfacción en el que la lectura es lo único que importa y que se convertirá, sin que nadie pueda evitarlo, en uno de esos descubrimientos que no hay que dejar pasar por nadie que quiera vivir y soñar, todo en un mismo libro (Para lectores de 10 a 12 años)