Picasso con los exiliados españoles

Reseña del libro “Picasso con los exiliados españoles”, de Mercedes Guillén

Picasso con los exiliados

Supongo que uno se acerca a un libro como este porque le interesa Picasso o porque le interesa la situación que vivieron los exiliados españoles en esa Francia que fue a la vez su gran esperanza y su pesadilla. No la peor, que esa la vivieron en casa, pero sí una complicada de vivir, por decirlo de una manera suave. Como es una narración en primera persona de alguien que vivió esa experiencia de primera mano y cerca del gran pintor, ya imagina uno que se va a tratar de un documento de gran interés histórico y de un testimonio personal probablemente emotivo, quien sabe si subjetivo. Pero lo que uno se encuentra al abrir este libro, al comenzar a leer la experiencia de Mercedes Comaposada Guillén, es un relato extraordinariamente bien escrito, con una sensibilidad muy especial. Es un testimonio personal, desde luego, pero a la vez de un gran valor histórico y no solo por los personajes del mundo artístico y literario que se asoman a estas páginas sino por la descripción del ambiente de la Francia ocupada, de la implicación de Picasso en del auxilio y soporte a sus compatriotas exiliados y de la vida cotidiana en ese tiempo y en ese lugar de tanto interés histórico, sí pero también literario.

Y descubre uno, bueno, yo la descubro, asumo que para mucha otra gente no debe ser una desconocida, a una autora de un gran talento narrativo, con un don para contar historias que sabe mantener un tono entre descriptivo y entrañable, pero también de biografía apasionante. Una persona de salud frágil que no obstante logró sobrevivir a la guerra, a la huída (a pie), a los campos de prisioneros, al hambre y las privaciones manteniendo siempre su inquebrantable compromiso con sus principios, muy destacadamente con la educación de quienes no la tenían, especialmente las mujeres, y con la cultura.

En Picasso con los exiliados descubre uno al pintor malagueño en la distancia corta, que aparentemente es la que mantenía con los exiliados españoles, conocidos o no, y es un retrato muy humano, muy entrañable, pero que no esconde los aspectos más duros de la vida de la Francia ocupada. Hay muchos artistas, muchos personajes relevantes pero aquí aparecen todos ellos desde un punto de vista tan inusual como interesante, la de alguien que compartió con ellos unas experiencias duras que forjaron una amistad sólida y duradera.

Este libro no fue escrito originalmente como llega a nuestras manos, esta es únicamente una parte de las memorias de su autora, la más relacionada con Picasso, completada con un perfil biográfico suyo que corree a cargo de Laura Vicente y que ayuda a poner en contexto a una autora que desde el principio se intuye muy interesante pero cuya verdadera dimensión se descubre gracias a este capítulo final. No solo es una mujer que reivindicar sino que fue autora de una obra desaparecida sobre la organización que fundó, «Mujeres libres», que es una lástima no poder leer.  

Picasso con los exiliados es una de esas obras que da mucho más de leo que promete, que es interesante y que logra transmitir su historia de forma que uno se siente extrañamente reconfortado. Apenado, claro, por el gran sufrimiento que tuvieron que padecer muchas personas, por el talento y el trabajo perdidos, pero que a la vez transmite un mensaje optimista por la solidaridad que en este libro representa Picasso, pero que fue el común denominador de tanta gente que tuvo que añadir a su sufrimiento el desprecio de su país de acogida y un hambre y unas privaciones que habrían hecho desfallecer a cualquiera pero que a ellos les empujo a seguir con su compromiso, y no me refiero al político, que también, sino al cultural. 

Andrés Barrero
contacto@andresbarrero.es
Twitter: @abarreror
Instagram: @andresbarreroro

Deja un comentario