Del tiempo y el río

Del tiempo y el río, de Thomas Wolfe

El propio autor nos da una pista sobre el tema central de Del tiempo y el río con su subtitulo: Una leyenda sobre la ansiedad del hombre en su juventud. Y es de agradecer, porque es un libro tan ambicioso, su vocación de totalidad es tal que conviene tener en mente cual es el hilo vertebrador de la historia para no correr el riesgo de perderse en ella. Y sería un extravío feliz, la carga de lirismo que Thomas Wolfe confirió a su obra la convierte en un lugar magnífico para deambular sin destino fijo, pero no obstante lo tiene y en su nombre, según contó él mismo, sacrificó gran parte de lo escrito por considerar que no aportaba nada a la historia pese a que algunas de las partes eliminadas eran, según él, “lo mejor que había escrito jamás”.… Leer la reseña completa del libro "Del tiempo y el río" “Del tiempo y el río”

El poder en el bolsillo

El poder en el bolsillo, de Jorge Elías 

El periodista argentino Jorge Elías se preguntó un día qué llevarían en los bolsillos aquellos que dirigen los destinos del planeta y comenzó a preguntárselo. Desde Bush a Hugo Chávez, José María Aznar, Lula, Álvaro Uribe, Néstor Kirchner y en fin, muchos más. No me extiendo en el listado porque la generalidad de los entrevistados confiesa lo mismo, no acostumbran a llevar nada. ¿Por qué habrían de llevar algo si en los bolsillos se suelen llevar objetos útiles para cubrir necesidades de la vida cotidiana? Necesidades que ellos no tienen. Metafóricamente muchos de ellos se llenan los bolsillos pero en la práctica se vacían y con ello Jorge Elías ha encontrado una metáfora perfecta del distanciamiento de la clase política con la ciudadanía a la que gobierna y con la realidad que en la que deberían estar inmersos.… Leer la reseña completa del libro "El poder en el bolsillo" “El poder en el bolsillo”

El joven Moriarty. El misterio del dodo

El joven Moriarty. El misterio del dodo, de Sofía Rhei 

El día de la inauguración de los juegos olímpicos de Londres estaba de viaje, así que no pude ver la ceremonia inaugural, que de todos modos nunca me ha llamado la atención, aunque es esta ocasión lamenté no haberla visto porque por lo que supe después había sido un homenaje british en toda regla, y eso es algo que siempre es digno de ver. Pues con la lectura de El misterio del dodo siento saldada esta deuda, porque puede que como homenaje resulte un tanto menos espectacular pero dudo que la ceremonia fuera más elegante, brillante y, sobre todo, divertida que este pequeño libro que además tiene el mérito añadido de no ser un autohomenaje.… Leer la reseña completa del libro "El joven Moriarty. El misterio del dodo" “El joven Moriarty. El misterio del dodo”

Todas las criaturas grandes y pequeñas

Todas las criaturas grandes y pequeñas, de James Herriot

Para quienes han estudiado o practicado veterinaria en los últimos cuarenta años, nos encontramos ante un libro, sencillamente, mítico. Para el resto de sus probables lectores, aunque no hayan visto una vaca de cerca en su vida, nos encontramos ante una obra entrañable, divertida y ante la que uno queda siempre en deuda porque siendo como es una obra autobiográfica para el escritor, el lector, una vez terminada, también la siente como tal porque a través suyo ha vivido, y desde dentro, una realidad que de lo contrario apenas habría intuido. James Herriot nos cuenta aquí sus inicios como veterinario en la Inglaterra rural y, novelando su profesión, plasma en su obra el que probablemente sea el más completo y entrañable retrato de esa sociedad y esa época que se haya escrito, pero además novela algo universal: la distancia, el abismo existente entre el aprendizaje y la práctica de una profesión.… Leer la reseña completa del libro "Todas las criaturas grandes y pequeñas" “Todas las criaturas grandes y pequeñas”

Qwerty Vintage

Qwerty Vintage, de Rafael Sarmentero 

Tiene Qwerty Vintage un cierto toque de originalidad, un algo de experimento, en su planteamiento que aumenta su atractivo, aunque al final ante lo que estamos en este libro de Rafael Sarmentero es ante una buena historia. Tiene varios aciertos destacables, y tengo la sensación de que el autor los plantea como juegos con el lector. El primero de ellos, por orden de aparición, es el de la apariencia de realidad en relación a la “singular ortografía del texto original”, ortografía que puede resultar incómoda pero que se mantiene “por expreso deseo del autor” y porque, además, no podría ser de otra manera tratándose de una historia ambientada como lo está Qwerty Vintage desde el propio título.… Leer la reseña completa del libro "Qwerty Vintage" “Qwerty Vintage”

El festín de John Saturnall

El festín de John Saturnall, de Lawrence Norfolk

Milord, los malvados crecen como la hierba y el
hombre virtuoso florece y se alza como una palmera..

De las muchas imágenes tristes que anidan en el catálogo de melancolías que es el imaginario colectivo, no creo que la menos dolorosa sea la de la contraportada de un libro que ha emocionado al lector cerrándose sobre éste dejándole tanto un vacío como una criatura llamada a crecer en su memoria. Se suele asimilar el disfrute de un libro a la velocidad con la que se lee, a la dificultad para dejarlo y su capacidad para restarle horas al sueño, pero hay otro índice del disfrute lector que es para mí más ilustrativo: cerrar el libro cada poco, releer párrafos por gusto, leérselos a los demás, cualquier cosa que sirva para retrasar el temido momento en que haya que pasar la última página y tener que lidiar con un vacío complicado de manejar, aunque en este caso particular se puede contar con un aliado de excepción: la cocina

La cocina en la que se preparan alimentos o la cocina en la que se confitan los afectos, porque da la sensación de que Lawrence Norfolk cocina como escribe, para su mujer según reza la dedicatoria (imposible no sentirse identificado), pero también escribe como cocina, esto es, a fuego lento.… Leer la reseña completa del libro "El festín de John Saturnall" “El festín de John Saturnall”

Cuando acabe el invierno

Cuando acabe el invierno, de Mary Ann Clark Bremer

Y en las palabras de los hombres que ames,
encuéntrate a ti misma, no los busques a ellos.

Mary Ann Clark Bremer se reconstruye a partir de su dolor, que es mucho, y para hacerlo vive, se equivoca, disfruta, padece, llora y ríe, todo ello con la inestimable ayuda de Virginia Wolf, para emerger, cuando acaba el invierno, como una mujer nueva, como una mujer fuerte que en realidad es la misma de antes recuperada la capacidad de amar. A veces se reinventa entre libros y música, a menudo entre amigas y en ocasiones contra si misma, y su reconstrucción transcurre en paralelo al nacimiento y desarrollo de su sobrina, como si ambas, naciendo del dolor, fuesen hermanas en su búsqueda de la felicidad.… Leer la reseña completa del libro "Cuando acabe el invierno" “Cuando acabe el invierno”

Muchacho de oro, muchacha esmeralda

Muchacho de oro, muchacha esmeralda, de Yiyun Li

Desde entonces, he aprendido que la vida es así, acabar todos los días como un polluelo negándose a que le devuelvan a la cáscara del huevo. Así son los personajes de Muchacho de oro, muchacha esmeralda, seres que no acaban de comprender muy bien qué hacen en este mundo, personas a las que la felicidad les es ajena en el peor de los casos porque  han conocido el dolor de perderla y se obstinan en huir de ella para evitarse sentirlo nuevamente y en el mejor, o al menos en el más habitual, porque la desconocen en absoluto.… Leer la reseña completa del libro "Muchacho de oro, muchacha esmeralda" “Muchacho de oro, muchacha esmeralda”

Tu corazón en un cofre

Tu corazón en un cofre,  de Mercè López y Rebecca Beltrán

Tu corazón en un cofre se presenta dentro de una cajita de cartón, lo cual, tratándose de la historia de una colección de corazones guardados en cofres resulta de lo más apropiado, porque al cerrarlo es inevitable que la caja haga lo propio y encierre en su interior además del libro un trocito del corazón lector agradecido. Y no por méritos propios porque no son muchos los corazones dignos de engrosar la real colección que inventaría la obra, sino como ofrenda voluntaria a la que Rebecca Beltrán y Mercè López se hacen merecedoras por su coraje y por el mérito poco común de lograr que nos reconozcamos en su propia locura.… Leer la reseña completa del libro "Tu corazón en un cofre" “Tu corazón en un cofre”

Los habitantes del bosque

Los habitantes del bosque, de Thomas Hardy

Si para describir a un personaje que aparece en escena en mitad del bosque sucio y cubierto de hojas, con el rostro quemado por el sol un autor decide decir “por su aspecto y su olor, Giles parecía el hermano mismo del otoño”, tiene andado mucho camino para ganarme como lector. Si además logra plasmar en su texto, plagado de interesantes reflexiones y referencias tanto literarias como filosóficas, una historia emocionante, llena de matices y, sobre todo, recrear un mundo propio del que se saborean los detalles, se sienten los olores y se conoce a los personajes, en ese caso lo tiene todo.… Leer la reseña completa del libro "Los habitantes del bosque" “Los habitantes del bosque”

¡Abajo el colejio!

¡Abajo el colejio!, de Geoffrey Willans y Ronald Searle

Este libro es una gloriosa, tremebunda e irreverente gamberrada. Y me gustaría decir algo solemne como que es una denuncia del sistema educativo inglés, pero no, aunque algo de eso hay. Este libro es una gamberrada y su objetivo primordial es la risa, objetivo que, dicho sea de paso, logra con solvencia desde la primera página hasta la última y en cuyo cumplimiento compiten en eficacia los textos de Geoffrey Willans y las ilustraciones de Ronald Searle. Y es muy inglés, y cuando los ingleses se ponen gamberros en esto del humor, ya se sabe, valga como muestra el título completo:

¡ABAJO EL COLEJIO!Leer la reseña completa del libro "¡Abajo el colejio!" “¡Abajo el colejio!”

Prosa

Prosa, de Anna Ajmátova

Anna Ajmátova fue una poeta capaz de decir cosas como  Dotado de una infancia eterna,/iluminado con perspicacia y generosidad,/la tierra entera ha sido su herencia,/y la ha compartido con todos, y a la que le prohibieron decirlas. O al menos publicarlas. Y esos versos en los que hablaba de Pasternak bien podían haber hablado de ella porque no se me ocurre una definición más afortunada de la poesía que esos dos últimos versos: la tierra entera ha sido su herencia y la ha compartido con todos. A Anna Ajmátova trataron de impedirle que compartiera su herencia y ella se refugió en la prosa, en la erudición, y escribió sobre sí misma y sobre otros, fundamentalmente sobre Gumiliov y los acmeístas y Pushkin, y es ese trabajo, al menos el que sobrevivió a las llamas que quemaron su trabajo tratando de quemar su dolor por la detención de su hijo, el que Nevsky tan felizmente nos propone.… Leer la reseña completa del libro "Prosa" “Prosa”